Busca proteger y fortalecer la salud física, mental y social de los familiares.
• Facilita el acceso a servicios médicos y psicológicos especializados.
• Promueve programas de atención psicosocial, contención emocional y acompañamiento comunitario.
• Gestiona apoyos de alimentación y bienestar, procurando la atención a los padecimientos actuales y fomentando la prevención.